La dificultad para tener hijos es una de las situaciones más difíciles de abordar tanto a nivel personal como de pareja

La sensación de pérdida de control sobre nuestros deseos y expectativas puede desencadenar una serie de emociones como estrés, ansiedad, frustración y sentimiento de culpa

La experiencia de la infertilidad es un fenómeno que en muchas ocasiones se vive en solitario y raramente es percibido por los demás. La vida personal del individuo se ve alterada, pero la estructura social permanece inalterada, lo que supone un factor de estrés y angustia añadido. De aquí la importancia de no afrontar en solitario este proceso.

Está comprobado que el estado emocional de la pareja puede afectar a los resultados de los tratamientos aumentando el éxito, si éste es el adecuado.

En Reprofiv consideramos fundamental ofrecer a nuestros pacientes apoyo psicológico desde el mismo momento en que se tiene conocimiento de la esterilidad, ayudando a disminuir la influencia negativa de estos sentimientos.